💚 Experiencia de la casa de acogida de Jade 💚
📖 Palabras textuales de su familia de acogida:
“Cuando decidimos ser casa de acogida, buscamos varias asociaciones, y una compañera de trabajo me recomendó Huellas Salvadas. Nos pusimos en contacto con ellos y vinieron a casa a conocernos.
En un principio iba a venir Carmela, una galguita de Barcelona, pero finalmente no llegó… y entonces apareció Jade.
Desde el primer día, Jade nos lo ha puesto muy fácil. Es más que buena. Al principio tenía miedo a los ascensores, a los espacios pequeños, y cuando levantábamos los brazos se encogía, esperando un golpe. 💔
Pero, tras dos semanas, entendió que aquí nadie le haría daño y que la escoba es solo para barrer. 🧹
Le costó adaptarse a la comida seca y racionada, pero ahora sabe perfectamente cuándo le toca comer y ¡se prepara para ello con emoción!
El día 22, coincidiendo con el Día del Podenco, le preparamos una comida especial y se volvió loca de felicidad. 🎉
Nunca ha hecho sus necesidades en casa, aunque se nos haga tarde: espera siempre.
Es una perrita muy, muy cariñosa, y busca cariño en cuanto puede. Es agradecida, alegre y dulce.
Sorprendentemente, para ser podenco, es muy tranquila: en casa es un auténtico peluche. 🐶
Le encanta el campo y las excursiones a la montaña, se lleva genial con los niños y tiene muchísima paciencia con ellos.
Es sociable con todos los perros, y si alguno no la acepta, simplemente se aleja sin conflicto.
Hemos tenido mucha suerte con ella. Para ser nuestra primera experiencia como casa de acogida, ha sido maravillosa.
Personalmente, no entiendo cómo es posible que nadie se haya fijado aún en ella, porque…
¡¡¡Es maravillosa!!! 💖”
💫 Experiencia de la casa de acogida de Leia — ahora felizmente adoptada 💕
📖 Palabras textuales de su familia adoptiva:
“Hola familia de Huellas Salvadas, esta es mi experiencia como casa de acogida:
La primera vez que vimos a Leia fue un sábado, pero la acogimos finalmente el martes. La trajeron Sandra, Estefanía y Rebeca.
Yo estaba deseando que llegara ese momento, aunque también muy nerviosa, porque ya teníamos a Simba, nuestro otro perrito. Por suerte, él es muy bueno y la aceptó desde el primer momento. 💕
Leia llegó a nuestras vidas con una patita enferma: tenía un tumor. Tras varias pruebas, el veterinario decidió que lo mejor era amputar la patita para eliminar cualquier riesgo. De todo aquello se encargó vuestra maravillosa asociación. 🙏
Los primeros días después de la operación fueron duros, porque aunque ella es muy fuerte, no podíamos evitar preocuparnos.
Pero Leia demostró ser una guerrera. Es una perrita maravillosa, buena y obediente.
En casa, Simba es el rey y Leia la reina 👑 — juntos llenan nuestras vidas de alegría, y creo que nosotros llenamos las suyas también.
Leia llegó como casa de acogida, pero en el fondo sabía que sería para siempre. Hoy forma parte de la familia y tiene su hogar definitivo. ❤️
La queremos muchísimo, es como si hubiera estado con nosotros toda la vida.
A pesar de tener solo tres patitas, Leia es feliz, corre y salta como cualquier otro perro.
Acoger es una experiencia maravillosa… pero darles un hogar para siempre lo es aún más.
P.D.: El nombre de Leia se lo puso mi hija Estela. 🌟”
💚 Experiencia de la casa de acogida de Chico 💚
📖 Palabras textuales de su familia de acogida:
“Conocimos a Chico cuando colaboramos con Huellas Salvadas, acogiéndolo en casa durante la feria de adopción de octubre de 2017.
Al terminar la feria supimos que nadie había preguntado por él, y decidimos acogerlo temporalmente para sacarlo de la residencia, donde había pasado ya un año entero.
A los pocos días, Chico ya corría feliz por nuestro pasillo. Llegó a casa un martes, 31 de octubre, de la mano de Fani y Cristian. Desde el primer momento se adaptó perfectamente, y enseguida se hizo amigo de nuestro perro Enzo. 🐶❤️🐶
Una de las anécdotas más divertidas fue cuando compramos un jamón: ¡Chico se volvió loco! Pasaba horas en la cocina ladrando al jamón, y si cerrábamos la puerta… ¡le ladraba a la puerta también! Iba y venía del salón a la cocina, con la cabeza en alto, olfateando el aire, buscando el jamón de sus sueños. 😂
El domingo siguiente participamos en el evento de Halloween organizado por Huellas Salvadas. Disfrazamos a Chico y a Enzo con unas capas de vampiro hechas a medida. ¡Estaban guapísimos! Chico desfiló orgulloso por la pasarela y se reencontró con su amigo Trasto. 🦇🎃
Al principio arrastraba algunos problemas de salud, pero poco a poco fue mejorando. Cada día estaba más integrado, su aspecto físico cambiaba y su energía también. No era muy deportista, salvo si había comida de por medio o cuando jugaba con Enzo y sus peluches. El agua y el secador no le gustaban demasiado, aunque se dejaba bañar y secar con resignación. 🛁
Chico vivió siete meses con nosotros, y durante ese tiempo aprendimos a quererlo muchísimo. Nos encantaba ver a Enzo y a él acurrucados en sus mantas, calentitos. Saber que no volvería a pasar frío nos llenaba de alegría. Lo mimábamos mucho, y él disfrutaba con nuestros cuidados.
Un día supimos que alguien se había interesado por él y que, si todo iba bien, sería adoptado. La persona que ahora comparte su vida con Chico es maravillosa. Hoy Chico es el rey de su casa, vive libre, feliz y muy querido. Sin duda, estaban predestinados a encontrarse. 💫
Este verano, Chico pasó una semana con nosotros durante las vacaciones de Baldo, su compañero —no su dueño, como él mismo dice: “Chico no tiene dueño, es un alma libre…” 🐾
Acoger a Chico nos ha dado la enorme satisfacción de ayudar a un perro a encontrar su hogar definitivo. Hemos vivido con él momentos de felicidad, risas y ternura, y nos deja recuerdos imborrables.
Ser casa de acogida nos ha permitido conocer a muchos perros de Huellas Salvadas y a sus voluntarios, personas increíbles que luchan por ofrecerles una segunda oportunidad. También nos ha hecho más conscientes del problema del abandono animal y nos ha enseñado a mirar este tema con más empatía y responsabilidad.
Nos sentimos muy felices y agradecidos de haber contribuido a que Chico, un perro que hace un año no tenía familia, hoy sea querido y cuidado como se merece.
¡Gracias, Chico, por compartir este tiempo con nosotros! 💕”